¿Medios = Manipulación?


En caulquier concentración o foro cívico (de uno u otro signo) es ya un lugar común acusar a los medios de manipulación. Muchas de estas denuncias están más que justificadas. Pero eso no quiere decir que se haya instalado un estado de opinión: las instituciones, los políticos, los medios, los periodistas no nos respresentan. Estado de opinión que por mucho que se presente como no ideológico no es más que una posición ideológica más.

Por eso, cuando me pidieron participar en una mesa redonda de periodistas en el Congreso Internacional de Educación Mediática & Competencia Digital (Segovia 14 de octubre de 2011) pensé que quizá podría trasladar a los académicos interesados en educar en medios mis reflexiones sobre lo que se pueda exigir a los medios y lo que no.

Parto para ello de un caso de estudio. Un blog no profesional critica una foto manipulada por El Mundo, el asunto se convierte en ciberacontecimiento y Pedro J. tiene que bajar a la palestra. No es más que un apunte que concecta con una de mís líneas de investigación sobre pluralismo informativo.

Esta es la presentación.

El testimonio del niño que Mladic acarició


Me preguntaba en otra entrada anterior que habría sido del niño que acariciaba Mladic. Como es lógico, no fui el único periodista en preguntarme lo mismo. Algún colega, seguramente un periodista local, le buscó, hizo el reportaje y a través de las agencias llegó a la Redacción de TVE, que hizo una digna pieza con este material (por cierto, no le hubiera venido mal un paso propio).

Se llamaba Izurin. Salió a por un poco de pan y chocolate cuando llegaron los soldados serbios. Era más niño de lo que aparentaba. Sólo tenía 8 años, pero decía tener 12. No sabía que se estaba jugando la vida, porque bien podría haber sido seleccionado en la fila de los hombres, destinado al sacrificio. Pero la salvo y hoy nos cuenta su historia.

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Los vídeos de Vodpod ya no están disponibles.

Por un nuevo compromiso periodístico


Agustín García Matilla me envía las conclusiones de las IV Jornadas de Periodismo en lo Global, en las que participé la pasada semana en Segovia. Os invito a su lectura, pero me permito realizar mi síntesis personal, que es muy sencilla: los periodistas tenemos que reconstruir nuestro compromiso con la sociedad, retornando a las buenas prácticas tradicionales, pero también sirviendo de conexión entre las redes sociales para reconstruir un espacio público democrático. Es la tarea a la que vengo denominando periodismo cívico (2009,“Periodismo Cívico versus Periodismo Ciudadano”. Observatorio Medios de Comunicación y Social, Fundación 1º de Mayo, nº 1, págs. 9-14).

En las conclusiones se reflejan bien los debates suscitados y el consenso de por donde debe caminar una regeneración del periodismo. Añadiré que en el debate final se manifestó el absoluto cuestionamiento de los más jóvenes hacia las formas tradicionales del periodismo tradicional, paralelo a la contestación de la democracia representativa. «Los medios mienten y manipulan» -algo hemos debido hacer muy mal los periodistas cuando los que se forman como comunicadores sociales nos ponen a todos en el mismo saco de basura.

Personalmente siempre he denunciado abusos, malas prácticas y manipulación. Recientemente, la profesora María Lamuedra («La profesión periodística ante las protestas ciudadanas») ha aplicado muchos de los hallazgos de la investigación sobre periodismo para demostrar la manipulación en el tratamiento informativo de la crisis. Todo eso es verdad, pero -lo siento- no creo que los periodistas, ni siquiera la mayoría de las empresas informativas sean un puro instrumento de dominación.

En cualquier caso, el periodismo profesional está necesitado de una regeneración ética. Las conclusiones de las Jornadas dan pistas muy valiosas para ello.

CONCLUSIONES  IV JORNADAS DE PERIODISMO EN LO GLOBAL

Un año más, con motivo de una nueva edición de los Premios Cirilo Rodríguez, la Asociación de la Prensa de Segovia y la Universidad de Valladolid en el Campus de esta ciudad han reunido a un nutrido grupo de profesionales de la Información, profesores, profesoras y estudiantes de Comunicación, y personas interesadas en el desarrollo de modelos de comunicación de calidad y al servicio de la sociedad. Las IV Jornadas de El Periodismo en lo Global han contado con más de 200 asistentes y más de una veintena de profesionales ponentes, que han debatido sobre el presente y el futuro de “El Periodismo en lo Global”.

En esta edición, las jornadas han permitido analizar un entorno influido por el papel de la comunicación ciudadana en las revoluciones del norte de África y por el movimiento del 15 M “Democracia Real, ya!” en las ciudades españolas, como símbolo de la denominada en medios de comunicación internacionales, como “Spanish revolution”.

Los aquí reunidos nos reafirmamos en los principios que en todos estos años han figurado en el frontispicio de la buena práctica profesional del Periodismo, principios resumidos por Kovach y Rosenstiel (2003) y que sintetizan los elementos necesarios para ejercer un periodismo de calidad: La búsqueda de la verdad, la lealtad ante los ciudadanos, el ejercicio de la disciplina de verificación, el mantenimiento de la independencia con respecto a aquellos de quienes se informa, el ejercicio de un control independiente del poder, el servir de foro público para la crítica y el comentario, el esfuerzo para que el significante sea sugerente y relevante, el compromiso de que la noticia sea exhaustiva y proporcionada y el respeto a la conciencia individual de sus profesionales.

En estas jornadas se ha vuelto a constatar con preocupación que en el momento actual la principal amenaza para las empresas es que el Periodismo, en una proporción muy grande, está gobernado por una política empresarial que atiende prioritariamente a la cuenta de resultados y que este hecho se ha agravado por la falta de previsión en la creación de un modelo de negocio que permitiera sobrevivir a las empresas en este nuevo contexto digital. Esta constatación  refleja que existe el riesgo de que se siga alimentando un proceso de devastación del trabajo profesional de calidad, también en el periodismo multimedia.

Muchas personas que trabajan en este campo han comprobado en su propia carne cómo el ejercicio de la independencia las ha llevado al paro. Más de 5.000 periodistas se han incorporado a las listas del paro al final de la primera década del siglo XXI. Los expedientes de regulación de empleo aplicados en la empresa pública estatal de radiotelevisión han provocado el que se prescinda de algunos de los profesionales más experimentados, perdiéndose así una oportunidad para que las más curtidas generaciones de periodistas transmitan su saber y conocimiento a quienes se incorporan a la profesión.

 El poder político no ha demostrado ser más sensible a la idea de que la buena información es un ejercicio imprescindible para la existencia de una democracia asentada y sólida. Esto se viene demostrando en los últimos años en ejemplos como la práctica usual de convocatorias de medios, ruedas de prensa, conferencias e intervenciones, sin turnos de preguntas ni repreguntas, o desde la práctica ya instaurada de un periodismo de declaraciones impuesto desde las direcciones de los partidos políticos, especialmente en períodos electorales. Los últimos acontecimientos muestran que muchos ciudadanos y muchas ciudadanas han llegado a un nivel de hartazgo extremo y han salido a la calle, también para reivindicar su derecho a la construcción de un ¡Periodismo real, ya!

En estas jornadas hemos podido constatar que los profesionales más experimentados y comprometidos con la profesión periodística, y las profesionales que comparten estos mismos valores, han convertido las carencias del sistema en una oportunidad para el cambio.  Las múltiples posibilidades que actualmente brindan las tecnologías de la información y de la comunicación sirven para ejercer una nueva AUTORITAS basada en la ética y el compromiso con la sociedad. La creación de blogs personales sirve para respaldar esa independencia profesional que en estos momentos resulta imprescindible. En estas jornadas hemos sido testigos de que el ejercicio de ese otro periodismo es posible y se concreta en iniciativas que pretenden servir también como una oportunidad para realizar un “periodismo humano”, que se desmarque de todo simulacro.

POR TODAS ESTAS RAZONES, LAS PERSONAS AQUÍ REUNIDAS SUSCRIBMOS LAS SIGUIENTES PROPUESTAS:

1)     El Periodismo en este contexto global sólo puede ser entendido desde la suscripción de un contrato simbólico con toda la sociedad que incluya la atención a los intereses de las mayorías y de las minorías sociales. Ese contrato parte de la atención a los principios ya asentados de un periodismo basado en la honestidad y en la búsqueda de la verdad como sinónimos de CALIDAD.

2)     En el contexto digital actual las empresas de comunicación cuentan con herramientas extraordinarias que facilitan el ejercicio de un periodismo multitarea. Se ha constatado que en ocasiones esta práctica ha llevado a un deterioro de la calidad del trabajo profesional y a la precarización del empleo. Es urgente que las empresas sean sensibles a las reflexiones realizadas por los propios profesionales de la comunicación y pacten los límites de una labor que debe llegar hasta donde sea posible, compatibilizando la nueva tendencia a la multifuncionalidad del profesional con el ejercicio del rigor y la calidad.

3)     Los profesionales de la información y de la comunicación tienen una responsabilidad pedagógica a la que no pueden renunciar. Los movimientos sociales que han salido a la calle en mayo de 2011 son el símbolo del afán de la sociedad por participar activamente en la construcción de otra comunicación posible. Son los profesionales quienes pueden mostrar cómo su labor puede ser facilitadora de unos flujos de comunicación que garanticen la veracidad de las informaciones.

4)     Las empresas deben sentir que los profesionales son los primeros interesados en suscribir un contrato con los ciudadanos y ciudadanas. El concepto de audiencia es un concepto meramente numérico que no es compatible con el actual contexto digital. Hace tiempo que los medios de comunicación deberían haber modificado su valoración sobre la cadena de valor que debería aplicarse en los procesos informativos. Muchos ciudadanos y muchas ciudadanas han asumido ya un papel activo en los procesos de comunicación y acceden de forma selectiva reprogramando de forma selectiva un acceso multimedia hasta ahora desconocido y produciendo también sus propias iniciativas de comunicación.

 5)      El ejercicio del periodismo permite que haya periodistas que han compatibilizado su colaboración con empresas públicas y privadas y un trabajo más integral que permite la realización de Videoblogs y bitácoras personales que están llegando directamente a las ciudadanas y a los ciudadanos a través de las redes sociales. Cada vez más este tipo de información está llegando hasta la sociedad de una manera más directa y eficaz que en los soportes tradicionales.

6)     Quienes ejercen el periodismo en la segunda década del siglo XXI se han dado cuenta que hay una nueva prioridad: poder contar el contexto. Es obligación de la información del siglo XXI humanizar y poner rostro a las noticias.

 7)     Las redes sociales son un instrumento interesante de comunicación y de intercambio pero a la vez facilitan el ejercicio de una información rápida y fragmentada que corre el riesgo de influir en el ejercicio de un periodismo superficial y descontextualizado que prefiere renunciar a la profundidad. Frente al ruido hay que oponer una información suficientemente contextualizada.

 8)     Los periodistas somos buscadores y facilitadores de información y debemos estar al servicio de la sociedad. Los medios de comunicación públicos son en estos momentos imprescindibles para liderar el desarrollo de una comunicación de calidad. El aprovechamiento social, educativo y cultural de la comunicación audiovisual y multimedia depende del trabajo que actualmente desarrollan en punta de lanza los medios públicos de comunicación: Agencia EFE y el desarrollo de medios interactivos en la Corporación RTVE.

  9)     Todas las instituciones, públicas y privadas, deberían ser conscientes del valor que el ejercicio del periodismo tiene para el futuro de la democracia y para la reconstrucción de un sistema económico sostenible. El deterioro de la profesión periodística es un reflejo más del deterioro de un sistema que está siendo denunciado por ciudadanas y ciudadanos que al margen de su militancia responden en su indignación a perfiles ideológicos de todo el espectro. Es imprescindible abrir un debate que permita consensuar unos mínimos que hagan posible el ejercicio de una información de calidad que responda a viejos y nuevos ideales.

10)Educar para la comunicación y el desarrollo del pensamiento crítico es una de los objetivos que deben unirnos para conseguir una sociedad que aproveche el inmenso potencial de las actuales tecnologías de la información y de la comunicación y sea capaz de responder a las exigencias de una ciudadanía que reclama también otra comunicación posible.

                             Segovia, 27 de mayo de 2011

 Desde la Asociación de la Prensa de Segovia y de la Universidad de Valladolid en el Campus de esta ciudad os invitamos a participar en el Congreso de Eduación Mediática y Competencia Digital que se celebrará en Segovia del 14 al 16 de octubre próximos en esta ciudad.

 

Al sur de la frontera


Ayer La Dos emitió «Al sur de la frontera», la película en la que Oliver Stone realiza el panegírico de Hugo Chávez y el bolivarianismo. Y digo «película», porque aunque las técnicas son las del documental (de una factura, por cierto, un poco chapucera) Stone se monta su propia «película». No es un documental sesgado, es una obra militante, propaganda si se quiere de brocha gorda.

En un trabajo periodístico, aún en el caso de que se tome partido por las víctimas no pueden faltar todas las voces. Lo que no sería admisible en un reportaje o en un documental periodístico puede ser legítimo en este tipo de obras. En este caso, me parece más un ajuste de cuentas de Stone con su propio país y una cierta fascinación por los «hombres fuertes» (Chávez, Castro) que el director norteamericano no oculta.

Creo que Chávez ha creado un caudillismo democrático, en el que la división de poderes queda seriamente dañada y que terminará por pasar factura a su país. A mi desde luego no me gustan los grandes hombres que fascinan a Stone, esa exaltación de la energía en movimiento. En los distintos líderes del bloque bolivariano hay luces y sombras (por cierto ¿por qué no aparece Daniel Ortega?). No hay sombras en «Al sur de la frontera».

Pero si hago esta entrada es porque encontré en la película algunos logros notables:

– Terrible la propaganda de los informativos norteamericanos. Quien no nos obedezca como un vasallo fiel es nuestro enemigo. ¡Cuánta ignorancia y manipulación! ¡Cuánto desprecio hacia sus vecinos del Sur! Sólo por la denuncia de esta manipulación que realiza Stone la película debiera ser analizada en las facultades de Periodismo.

– Una perla que explica los liderazgos bolivarianos. Cristina Kirchner observa: «Es la primera vez en la Historia que el rostro de sus líderes se parece al de sus pueblos».

Otra perla, ésta de Lula : «Es la primera vez que los pobres están siendo tratados como seres humanos en América Latina».

Creo que Lula y Cristina tienen razón. Pero eso no puede significar carta blanca para los líderes de la izquierda y el centro izquierda. Por que destruir la «democracia formal» significa volver a tratar a los pueblos como menores de edad sin discernimiento.

La revolución en Marruecos la harán los pobres


No me resisto a hacer una entrada breve para recoger la esclarecedora visión del periodista marroquí Ali El Merabet recogida en una entrevista de Juan Ramón Lucas en Radio Nacional.

Merabet teme las redadas indiscriminadas de cientos, miles de personas, que pueden ser detenidas a raíz del atentado de Marraquech. De esos miles, sometidos a vejaciones o torturas, se obtendrá un  grupo, quizá una decena, que se presentarán como culpables, lo sean o no.

Preguntado si el atentado puede detener las reformas se pregunta ¿qué reformas?. El Rey ha encargado a un constitucionalista de confianza que reforme la Constitución. Una reforma, una revolución pasa por una asamblea constituyente.

«La revolución la traerán los pobres de las ciudade, de los barrios periféricos abandonados por el Estado; no los jóvenes que salen de picnic gritando cuatro consignas». Es el diagnóstico de Merabet. «No a la monarquía aboluta -dicen- pero no atacan al Rey».

No conozco al periodista. Sólo he encontrado una referencia a una condena de inhabilitación, pero no sé si se trata de las misma persona. Lo que no cabe duda es que el colega que hoy hablaba en RNE tiene coraje. La entrevista me ha reconciliado con la radio.

Audio entrevista

Rectifico: la transcripción de RNE me ha despistado. Se trata de Ali Lmrabet, veterano periodista y luchador democrático, director de Demain. Aquí dejo el vínculo a su artículo «Un attentad qui conforte le régime marocain».

El estancamiento


El sol se levanta en Madrid en medio de una atmósfera saturada de polvo africano. Un disco perfecto de luz fría, filtradas sus tonalidades cálidas por las particulas llegadas del desierto. Sensación más que de quietud, de estancamiento.

El estancamiento atmosférico me hace pensar en el estancamiento informativo de estos últimos días. Los grandes acontecimientos globales han perdido fuelle. Ahí están, con todo su potencial de cambio y desestabilización, pero los medios están cansados y la monotonía lo filtra todo. Es la hora de los pequeños sucesos locales.

En Libia, los bombardeos de la OTAN han llevado el conflicto a un aparente punto muerto. Los medios se aburren y sus enviados especiales se las ven y se las desean para colocar una crónica.

Washington, París y Londres están ya dando asistencia a los rebeldes, pero no parece que terminen de decidirse por un apoyo decisivo. ¿No se fían de los rebeldes? ¿Temen que si los arman (lo que supondría la violación de las resoluciones 1970 y 1973) perderían la tibia aprobación de sus opiones públicas? ¿No quieren implicarse más en una guerra incierta?

Turquía busca alguna forma de alto el fuego que supondría la división de hecho del país y la supervivencia de Gadafi y sus hijos.

Atención al 4 de mayo. En un acto sin precedentes, el Fiscal del Tribunal Penal Internacional, Moreno Ocampo, informará al Consejo de Seguridad. Debería presentar pruebas de los crímenes de guerra o contra la humanidad que pudieran haber cometido unos y otros (los prisioneros de ambos bandos pueden estar en peligro). De esta reunión podría salir la luz verde para emitir una orden internacional de detención contra Gadafi, lo que cerraría las puertas a componendas como las que intenta Turquía.

Mientras, en medio del estancamiento, la muerte de 200 libios, tragados por el mar cuando intentaban llegar a la isla de Lampedusa, apenas arranca titulares.

Del resto de las revoluciones árabes apenas nada nos cuentan. Nada de Baréin, donde la revolución ha sido reprimida por el Consejo de Cooperación del Golfo (Catar interviene en contra de la «democracia» en Baréin y a favor en Libia). De Siria nada se habla hasta que vuelva a ver otro estallido. De Marruecos, todos satisfechos con las promesas del Rey. Y que decir de Túnez y Egipto ¿sabe alguien cómo marchan sus transiciones?.

De Costa de Marfil, información elaborada en España o -lo que es peor- en París. Otra guerra africana que no entendemos ni queremos entender. Allí, la presencia de fuerzas de la ONU no han impedido las matanzas (como las ejecutada por las fuerzas de Outtara, el presidente «legítimo»). Las tropas francesas se limitan a proteger a los europeos y se convierten en otra parte más del conflicto al atacar a Gbabgo. Costa de Marfil muestra las limitaciones y contradicciones de la «intervención humanitaria».

El otro gran acontecimiento mediático, las catástrofes de Japón, también han caído en la rutina. Fukushima sigue ahí como una bomba de tiempo, pero los expertos parecen que ya han dicho todo lo que tenían que decir (por ahora la población no corre demasiado riesgo y nadie sabe que hacer con la central). Algunas poblaciones (Alemania) han sacado sus conclusiones.

Portugal se rinde y pide rescate. España no es Portugal… La economía va mal, pero las previsiones van bien, así que sus gestores están más que satisfechos.

Los críticos dicen a los periodistas que han magnificado las revoluciones árabes y se han olvidado de la «revolución» de Islandia, el único lugar en que se ha encarcelado a banqueros.

Estancamiento informativo, estancamiento económico (recesión+inflación), estacamiento político

La era Brezhnev se conoció en la URSS como la del estancamiento y durante ella el sistema, incapaz de innovar política, económica o socialmente, sometido a la carrera de tecnológica y armamentística impuesta por Estados Unidos, se fue vaciando por dentro hasta que se derrumbó con Gorbachov.

Aquí los jóvenes empiezan a responder a este estamiento resignado. Juventud Sin Futuro sale hoy a la calle. Veremos que voz les dan los medios. Veremos si son capaces de mantener su grito más allá de la instantaneidad de las redes sociales.

Periodistas en peligro


El mundo está lleno de lugares peligrosos. Lugares en condiciones ambientales o sociales muy difíciles; lugares donde el hombre es un lobo para el hombre y la vida de un ser humano no vale nada.

Sólo algunos de estos lugares son noticia y muy pocos son protagonistas de la información global. Dos puntos calientes son hoy escenario de acontecimientos globales, Japón y Libia.  Y cómo es lógico, allí están los periodistas para contarnos lo que pasa, periodistas locales, corresponsales y enviados especiales.

Por el momento, Libia es mucho más peligroso para los periodistas que Japón. Gadafi ha detenido, encarcelado y maltratado a varios periodistas internacionales, y sus fuerzas emboscaron a un equipo de Al Jazira y mataron a uno de sus periodistas.

En estos momentos se da la batalla por la estratégica ciudad de Abdabiya. Si las tropas de Gadafi toman este nudo de comunicaciones podrían avanzar por la carretera del desierto hasta la frontera con Egipto y dejar en una bolsa a Tobruk y Bengasi. La mayor parte de la prensa internacional ha abandonado ya Bengasi y ahora está basada en Tobruk, desde donde hace incursiones informativas hacia Bengasi, hasta hace unos días un asentamiento seguro para la tribu periodística. Si Tobruk cayera es posible que bastantes periodistas no pudiera cruzar a Egipto, pero tal cosa parece improbable porque los leales a Gadafi tampoco avanzar tan rápido como si se tratara del «blitzkrieg» alemán y lo más probable es que la mayoría pudiera ponerse a salvo.

En Japón, la amenaza es más difusa.La exposición a la contaminación nuclear, hasta ahora, mientras no se entre en la zona de exclusión en torno a Fukishima, no pone en grave peligro la vida ni la salud, pero su evolución resulta imprevisible.

La obligación de los periodistas es estar en Japón y en Libia y contarlo, pero sin correr más riesgos que los que sean razonables. Ya sé que es imposible establecer el límite, pero, desde luego no vale la pena jugarse la vida por el Pulitzer. Hay que pararse en el límite del «territorio comanche» -Evaristo Canet dixit. Pero hay que estar en lugares como el Sarajevo asediado.

En cualquier caso, los periodistas extranjeros corren menos riesgos que los locales y que los fixers (los ojos y los oídos del extranjero) que los han auxiliado. El extranjero puede ser respetado como emisario o pieza de cambio; estar protegido (hasta cierto punto) por su país; en cualquier caso, siempre le queda coger el último avión. Al local no y especialmente el fixer puede ser perseguido por colaboracionista con el extranjero (recuérdese los Gritos del Silencio).

La de periodista es una profesión peligrosa. Cada año, las estadísticas reflejan medio centenar de profesionales muertos en misión informativa. Pero no se dice lo suficiente que la mayoría son freenlance locales, casi siempre fotoperiodistas o videoperiodistas.

Las verdaderos héroes no ganan nunca el Pulitzer. Son los que en su comunidad denuncian cada día, sin brillo ni glamour, los abusos de los poderosos. Son perseguidos y algunos abandonan. Otros perseveran hasta que son asesinados. Fue el caso del colombiano Pedro Cárdenas, asesinado después de ser uno de los protagonistas del En Portada «Madito Oficio». Para él y para tantos anónimos periodistas, mi homenaje.

Los vídeos de Vodpod ya no están disponibles.

El futuro del periodismo más allá de WikiLeaks


Me quedé sin batería y tuve que dejar de tuitear. La verdad es que fue un alivio porque me sentía como parte de una gran cacofonía, cotorreando desde el Reina Sofía el desarrollo del panel sobre «WikiLeaks, las revoluciones árabes y el futuro del periodismo», que reunió ayer en Madrid a los directores de El País, The New York Times, The Guardian, Le Monde y Der Spiegel.

La gran pantalla mostraba tuits, entradas de Eskup (el twitter de El País), retuits, la imagen realizada  que se retransmitía el panel en streaming…. los titulares con los que unos y otros pretendíamos sintetizar las reflexiones ya de por si breves de los participantes, bajo la etiqueta #periodismoconfuturo. Un agobio.

¡Ay! El pensamiento instantáneo. Añoro las aburridas conferencias de una hora y los largos ensayos de 300 páginas. Pero que le vamos a hacer, estamos condenados a escoger entre hamburguesas y sofisticados platos deconstruidos, sin que quepa la posibilidad de los nutritiva cocina tradicional.

Poco aportó el acto, al que asistieron mayoritariamente estudiantes de periodismo. No es que no se plantearan las cuestiones pertinentes o que los directores no las respondieron. Es que todo ya se había dicho por activa y pasiva.Como ejemplo, el largo artículo de Bill Keller sobre sus relaciones con Assange y WikiLeaks.

Mi síntesis:

– Los documentos revelados por WikiLeaks sólo podían cobrar sentido mediante el filtrado y el tratamiento periodístico que sólo podían hacer las grandes redacciones. WikiLeaks exigía gran periodismo.

– Para todos, WikiLeaks era una fuente y como tal la trataron.

– Sea o no periodista Assange, sea Wikileaks un medio o no -y aquí había matices- todos estaban de acuerdo que su actividad está protegida por la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.

– Las revelaciones siempre serán bienvenidas, pero ningún medio puede trabajar con fuentes absolutamente anónimas, como ocurriría con las cajas negras confidenciales en las que depositar anónimamente documentos.

– Revoluciones ha habido siempre, pero las revelaciones de WikiLeaks aumentaron la indignación de las poblaciones árabes y las redes sociales les ayudaron a movilizarse.

– Casi nada se habló del futuro del periodismo y muy poco del modelo de negocio. The Guardian, modelo abierto. Der Spiegel y Le Monde, de pago la publicación en papel en la Red; The New York Times, pago a partir de un determinado número de informaciones ( a a final de año). Todos, pago en las nuevas plataformas como las tabletas.

Mascolo arrancó el único aplauso de la tarde cuando se preguntó porque su revista, Der Spiegel, no podía costar más que un café macchiato en Starbucks. Los jóvenes periodistas estaban de acuerdo con que su trabajo debe pagarse. Como me dijo luego uno de mis alumnos asistente, «el futuro acojona».

Estoy de acuerdo con Rusbridger, el directo de The Guardian, con poner al periodismo profesional en el centro del nuevo ecosistema informativo donde los periodistas ya no tienen el monopolio de la información.

Por ahí va el futuro.

Los «documentos palestinos», epitafio para el proceso de paz en Oriente Próximo


Reveladas las negociaciones entre la Autoridad Nacional Palestina e Israel

Hay vida más allá de Assange y WikiLeaks. Al Jazeera ha conseguido 1600 documentos confidenciales que recogen las minutas de la negociación entre israelíes y palestinos en la última década y ha compartido su publicación con The Guardian (navegación en la base de datos de The Guardian)

Estos palestine papers muestran, como dice The Guardian, la lenta agonía de unas negociaciones de paz en los que la parte palestina es cada vez más débil y está más dispuesta a hacer concesiones.

En esencia, lo publicado hasta ahora muestra que:

– Sobre la base de las fronteras del 67, la parte palestina aceptaba el principio de amplios intercambios territoriales que consagraban la anexión por Israel de las principales colonias.

– Los negociadores palestinos estaban dispuestos a aceptarla anexión israelí de todos los asentamiento de Jerusalén Este, salvo Har Homa (Jabal Abu Ghneim)

– Los palestinos aceptaban el control israelí del barrio judío y del barrio armenio de la ciudad santa.

– Exigían en cambio el desmantelamiento de Ariel, la gran ciudad que prácticamente parte en dos a Cisjordania.

– Los palestinos reducían la reivindicación sobre los refugiados al retorno simbólico de 100.000 al estado de Israel.

Concesiones todas de la máxima envergadura rechazadas por Israel.

Composición de Al Jazeera

Al Jazeera y supongo que todos los medios árabes citan esta frase del negociador palestino Saeb Erekat. Es la expresión de la oferta de entrega de mayor parte de la sagrada Al Quds a la Jerushalayim judía, a cambio de otros territorios en la misma área. Fuera de contexto es casi una confesión de traición de la causa árabe y palestina.

Pero hay que leer la minuta de esa reunión del 4 de mayo de 2008 para comprender que se trata de una oferta muy seria de negociación,  que busca esencialmente la continuidad territorial de un futuro estado palestino. La magnitud de la concesión es apreciada por la ministra de exteriores israelí Tzipi Livni, pero no por ello deja de ser rechazada.

El fin de la solución de dos estados

Los documentos muestran crudamente la gigantesca mentira del llamado «proceso de paz». Unos dirigentes palestinos, cada vez con menor legitimidad interna, se ven obligados a ir una y otra vez a la mesa de negociaciones en una posición más débil, para tratar de preservar una parte menor de territorio, mientras Estados Unidos les exige mayores concesiones, simplemente para que puedan sentarse a la mesa.

Shlomo Ben Ami ha insistido en infinidad de ocasiones que ambos pueblos, conducidos por dirigentes carismáticos, tendrían que hacer concesiones dolorosas.

Ya no existen dirigentes carismáticos y sólo los funcionarios de la Autoridad Palestina están dispuestos a hacer concesiones que posiblemente les costarían el puesto y hasta la vida. No se puede decir que sean traidores por ello. Otra cosa es la colaboración con la seguridad israelí, el conocimiento previo del ataque a Gaza, y, sobre todo, reconocer el «carácter judío» del estado de Israel, una verdadera traición a los árabes israelíes.

La revelación es histórica porque es el acta de defunción de un proceso de paz muerto hace mucho tiempo. La Autoridad Nacional Palestina queda en una situación muy frágil y su proclamación unilateral de un estado palestino parece más improbable. Y si la solución de dos estados se evapora, la ocupación israelí es el único horizonte inmediato.

Como muchos observadores han advertido las nubes de tormenta bélica llevan meses cargándose. La filtración puede ser la chispa que incendie el polvorín. No sé quién habrá filtrado los documentos. Israel se confirma como la parte intransigente e insaciable. Esto no mejorará su cada vez más dañada imagen exterior. Desde este punto de vista le perjudica. Pero también puede ser un paso más hacia un nuevo ajuste bélico, que sus jefes militares están pidiendo a gritos.

Cada vez me parece que la única solución justa es un  único (por ahora inviable) estado democrático para palestinos y judíos.

(Shlomo Ben Ami sostiene que estos principios ya habían sido aceptados por Arafat en el marco del plan Clinton. Aquí dejo la entrevista en Al Jazzera)

Wikileaks desmitificado


Los habitantes del ciberespacio tienden a magnificar cualquier acontecimiento. WikiLeaks desborda el ciberespacio y seguramente marcará un antes y un después en el manejo de la información pública. Nos ha confirmado que el Imperio es poderoso y sus vasallos poco dignos. Nos obliga a replantearnos toda la cadena de producción periodística, de las fuentes a la publicación. Pero no está de más dismitificar un poco. Y para ello, sin que sirva de precedente reproduzco aquí algunos de los párrafos del artículo de Daniel Peral en Europa en Suma. Un poco de vitriolo nunca viene mal.

WIKILEAKS. EL FILTRADOR, FILTRADO.

Por Daniel Peral

Convendría centrar la discusión, porque, en caso contrario, podríamos  pensar que estamos ante “o maior acontecimento da historia da humanidade”, que diría un portugués.

La aldea global se ha dividido, como en la primera guerra mundial entre aliadófilos y  germanófilos, entre detractores y partidarios de Wikileaks.

[—]

Faltan más filtraciones, por ejemplo: que papel jugó Goldman Sachs en la caída de su rival, Lehman Brothers, el taponazo de la crisis financiera. ¿Era necesario que cayera esa entidad y la otra no? ¿Se trató, como han señalado algunos medios, de una guerra entre gigantes, crisis de hipotecas-basura aparte?

Queremos fugas del trabajo de la silenciosa y efectiva diplomacia China que desprecia la situación de los derechos humanos en África, donde tiene ya un millón de trabajadores y de donde saca petróleo, madera, gas, coltán, y de los ciberataques de Pekín, ayer contra Google y Facebook, ahora contra Skype. Paradójico ¿no?, cuando ellos fabrican los ordenadores y móviles de última generación, pero no permiten a los chinos tener acceso a las nuevas redes sociales .Queremos conocer todas las interioridades del despótico régimen ruso, y, como me dice un amigo que vive desde hace años en Calcuta (pronúnciese Galkata), de la inmensa corrupción política de la emergente y aparentemente modélica India.

Queremos conocer la contaminación real de nuestros grandes bancos, los españoles, por el virus del ladrillo En  fin, queremos desayunarnos cada día con un escándalo y saber lo malos que son y somos todos.

Por cierto, poco se ha filtrado de como Israel ha “toreado” de nuevo a los EEUU, en esta ocasión al inicialmente firme Obama, que pedía el fin de la expansión de los asentamientos judíos en tierra palestina para resucitar al difunto proceso de paz. Antes, cayeron Bush padre y  Clinton; con W no había problemas. No hemos visto ninguna queja de los diplomáticos por la brutal expansión de las colonias y las condenas de los palestinos. Sólo, la preocupación de Israel, su miedo escénico e histórico, frente a los misiles y el arma nuclear iraní ¿Curioso, no?

Los fanáticos de la nube consideran que la historia cambia cuando aparecen ellos, que nada será igual después de Wikileaks, como aquella tontería de Fukuyama de que la historia había llegado a su fin con la caída del muro de Berlín y el triunfo del capitalismo como Sistema Único, que traería la paz y la concordia global al mundo. Lo estamos viendo. Lo fans de lo global no recuerdan la invención de la escritura en aquellas modestas tablillas de barro, la de la rueda, el fuego o la pólvora. Nadie dijo en su momento que la historia había cambiado. No tenían relatores globales, Wikis, ni iPhones que lo contaran.

Uno de los acontecimientos más importantes de finales del siglo XX, con gigantescas consecuencias, queridos jóvenes y jóvenas, entusiastas ahora de las Wikifugas, se produjo sin la red social, sin Internet, sin teléfonos móviles, ni de los antiguos ni de los “inteligentes”. Y fue hace nada, sólo 20 años. Fue un movimiento creciente de protesta de los alemanes del Este, los héroes de aquella revuelta, por el boca a oreja, como se dice ahora, en la que no hubo ni un muerto ni un herido y que acabó con los regímenes “socialistas” del Este de Europa, la economía  planificada, los sueños del viejo filósofo de Tréveris, con siglo y medio de luchas obreras. Aquellas gentes abrieron grietas en el muro de Berlín. Lo que no sabían los pobres, y  nosotros tampoco, es que con ese momento histórico, de verdad, de lo buenos, daban carta blanca al capitalismo brutal, el único sistema que quedaba y cuyas consecuencias estamos viviendo desde 2007

 

(Como aperitivo es suficiente. Os remito de nuevo a la lectura del texto completo)