El ignorado genocidio de Sudán


Sudán tiene una posición estratégica. Frontera con Egipto (controla el cauce del Nilo medio), con frontera con Etiopía y los países de África central. Tiene una compleja historia, siempre con la referencia de Egipto. Ahora sufre una guerra civil, que ha degenerado en un verdadero genocidio, que cursa a través de una hambruna generalizada provocada.

Cuando peor era el cerco de los serbo-bosnios sobre Sarajevo y más eran las voces que pedían la intervención internacional para detener el genocidio, Butros-Ghali, el egipcio, entonces secretario general de la ONU, declaró «hay una decena de lugares en los que las condiciones son peores que las de Sarajevo». Efectivamente, el genocidio de Bosnia, impidió dar la importancia que merecía al de Ruanda.

Ahora el genocidio de Gaza nos ha distraído del que se desarrolla en Sudán. Con toda su complejidad, el conflicto en Palestina consiste en el exterminio gradual del pueblo palestino durante 80 años: dos pueblos luchando por un mismo territorio; un proceso que ha llegado a su culmen con la obliteración de Gaza. Más «entendible» que el mosaico de fuerzas en lucha en Sudán. Además, los palestinos, como los judíos, tienen redes de solidaridad por todo el mundo.

Vamos ya con Sudán. Conquistada por Egipto en 1822, pasó, al igual que este país a la dominación británica. Tras su independencia en 1956, el país vivió una época de inestabilidad hasta que un golpe de estado instauró en el poder al mariscal Yaafar al Numeiri, un militar nacionalista, según el modelo del egipcio Nasser.

Sudán no tiene la cohesión de Egipto; está atravesada por múltiples fracturas: religiosa (al norte musulmanes, al sur cristianos y animistas), étnicas (árabes blancos y africanos negros) y económicas (agricultores pobres, y ciudades más ricas). Estas fracturas se cruzan y producen profundas divisiones e inestabilidad permanente.

Tras guerras de décadas, el Sur -más africano, que árabe- se independiza en 2011 para casi inmediatamente empezar una guerra civil, que enfrenta a dos facciones en torno a los dos jefes que capitanearon la guerra de independencia. En el trasfondo, las luchas étnicas y el control del petróleo de la región de Juba. El envío de una fuerza internacional no ha detenido la guerra y, como consecuencia el país se encuentra al borde de la hambruna. Los pozos de petróleo del Sur suponen el 75% de la producción de los de países, aunque las refinería están en el norte en Puerto Sudán, a orilas del Mar Rojo.

En Sudán del Norte, la primavera árabe tuvo como consecuencia el derrocamiento del dictador Al Bashir en 2019. El ejército colabora en principio con los civiles en una transición hacia la democracia. El ejército rompe los acuerdos con los movimientos democráticos y entra entonces en juego la rivalidad entre las Fuerzas Armadas que controlan la capital Jartún (el centro del poder político), menos los cuarteles de la fuerza paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido; comienza una lucha por el control de la capital, que poco a poco se extiende a todo el país.

Las Fuerzas de Apoyo Rápido, entonces a las órdenes de Al Bashir ya ejecutaron crímenes de guerra y de lesa humanidad en Darfur en 2002; eran entonces las milicias yanwauid: formadas por tribus árabes de ganaderos nómadas, mientras que a población de Darfur son árabes musulmanes, pero agricultores sedentarios. Su exjefe ha sido condenado por el Tribunal Penal Internacional por 27 cargos de crímenes de guerra y de lesa humanidad cometidos entre 2003 y 2004. Así explica el conflicto actual Amnistía internacional, que pide el embargo de armas. Nuevamente los crímenes más graves se están cometiendo en Darfur. La toma de Al Fhaser (capital de Darfur Norte) por las Fuerzas de Apoyo Rápido (antiguas milicias yanuuayid) ha supuesto una ola de atrocidades, ejecuciones sumarias y presuntos crímenes de lesa humanidad, con ataques a campamentos de desplazados, que están ahora en condiciones críticas, como informa Médicos Sin Fronteras.El conflicto también tiene una dimensión internacional: se sospecha que Emiratos Árabes Unidos (una potencia regional) apoya a las Fuerzas de Despliegue Rápido.

Una guerra, difícil de explicar,que tiene todos los rasgos de genocidio en Darfur y de la que solo sabemos por las organizaciones internacionales; para los medios es un lugar difícil de cubrir y desconocido para el público, pero que no podemos ignorar. Poco podemos hacer más que apoyar a organizaciones que trabajan en la zona como Amnistía Internacional o Médicos de Mundo o ACNUR (la organización de Naciones Unidas para los refugiados).

POST SCRIPTUM. Mi amigo José Ignacio Iríbar, enviado especial a Sudán del Sur en su proclamación de independencia, me recuerda la importancia del petróleo para la constitución de un estado poco viable. Desde el primer momento, hubo vuelos directos entre Juba (la región petrolífera de Sudán) con Dallas, la capital del petróleo en Texas.

Publicado en General. 1 Comment »

Una respuesta to “El ignorado genocidio de Sudán”

  1. Avatar de Maria Antonia Gonzalez-Valcarcel Maria Antonia Gonzalez-Valcarcel Says:

    Gracias Rafa. Dificil situacion y muy desconocida tanto geografica como politicamente, pero dramatica

    Mª Antonia González-Valcárcel Sánchez-Puelles a r q u i t e c t a


Deja un comentario